Un agente de la Policía Nacional ha sido condenado a pagar una multa de 4.500 euros y a dos años de inhabilitación para desempeñar cargos públicos por revelar secretos a un tercero. El agente, que trabajaba en los servicios de respuesta, conducciones y custodias de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana, accedió ilegalmente a bases de datos policiales restringidos en 77 ocasiones entre 2018 y 2019 a petición de su amigo.
En una ocasión, proporcionó claves de acceso a un compañero de trabajo para que consultara un atestado policial y luego le envió pantallazos con la información obtenida a su amigo.
La decisión de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Valencia puede ser recurrida ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
Fuente: Poder Judicial