El Juzgado de Primera Instancia número 6 de Lleida ha exonerado a una mujer residente en Segrià de una deuda que alcanzaba casi el millón de euros. Concretamente, la Justicia ha exonerado 983,857 euros de esta deuda al aplicar la Ley de la Segunda Oportunidad. La actora, a quien el juez ha considerado una deudora de buena fe, se encontró en esta situación de insolvencia después de avalar personalmente un préstamo de 350,000 euros que su hijo solicitó para llevar a cabo un proyecto inmobiliario de diez viviendas. Sin embargo, debido a la crisis en el sector de la construcción que se inició en 2007, el proyecto nunca se completó.
Dado que el préstamo estaba respaldado también por su difunto esposo y la madre de este último, se presentaron concursos de herencia yacente y se liquidó todo el patrimonio. La demandante se quedó sin herencia y sin una perspectiva económica estable. A fin de hacer frente a la deuda, la mujer se vio obligada a vender todo su patrimonio, pero incluso así, no fue suficiente.
Los hechos
La mujer, quien actualmente tiene 78 años, dedicó la mayor parte de su vida al trabajo autónomo en labores relacionadas con la agricultura y la ganadería. De hecho, gestionó un negocio familiar junto a su esposo, quien falleció hace ocho años. En un momento dado, la mujer avaló un préstamo de alrededor de 350,000 euros solicitado por uno de sus hijos con el propósito de llevar a cabo una promoción inmobiliaria de 10 viviendas.
Los problemas comenzaron en 2007, cuando surgió la crisis en el sector de la construcción, impidiendo la finalización del proyecto y, por consiguiente, el cumplimiento de las obligaciones financieras asumidas. A partir de ese momento, su vida se convirtió en un verdadero calvario. Después de años de preocupaciones, dado que el préstamo estaba también respaldado por su difunto esposo y la madre de este último, se presentaron procesos de herencia yacente y se liquidó todo el patrimonio, dejándola sin herencia y sin un futuro económico seguro.
Las llamadas constantes del banco añadieron a sus angustias y perturbaron su paz mental. Como muchas otras personas, sin considerar plenamente las consecuencias, respaldó a sus hijos al avalar proyectos con todo su patrimonio.
Incluso, en el mes de mayo pasado, le embargaron los escasos ahorros que tenía provenientes de un rescate de un plan de pensiones, que ascendía a 6,000 euros. Como resultado, su situación se volvió insostenible tras perder esos escasos ingresos.
Afortunadamente esta angustiosa situación a finalizado a principios de octubre, cuando el magistrado del Juzgado de Primera Instancia número 6 (especializado en asuntos mercantiles) en Lleida determinando la exoneración de la significativa deuda que ascendía a 983,857 euros gracias a la aplicación de la Ley de la Segunda Oportunidad y la consecuente liberación de la deuda no satisfecha.